Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

+QUENÓMINA

+QUENÓMINA

¿Sabías qué…? En España se plantea la posibilidad de cobrar por ir al trabajo en bicicleta

Todos tenemos claro que si cada mañana fuésemos al trabajo en bici estaríamos aportando beneficio a tres importantes factores:

  • A nuestra Salud gracias al ejercicio realizado.
  • A nuestra Ciudad en tanto en cuanto favoreceríamos a menos atascos.
  • A nuestro Planeta con menos emisiones y contaminación tanto ambiental como sonora.

Y entonces… ¿por qué los gobiernos y comunidades autónomas subvencionan el transporte público con tarjetas transporte o se producen ayudas al combustible para coches?

Pues bien… tres ejemplos de cambio de tendencia donde varios países han puesto en marcha iniciativas para pagar a los trabajadores que se desplacen en bicicleta a los centros de trabajo

1.- Países Bajos: han subido este año la subvención estatal por kilómetro en bici de 19 a 21 céntimos (la cantidad final puede superar los 1.000 euros al año) aunque también se aplica a transporte público y coche.

Es una compensación por el coste de la gasolina y del transporte público congelada en 19 céntimos desde 2006 y que ahora en el 2023 ha pasado a 21. Se prevé que en 2024 aumentará a 23 céntimos.

La fórmula de funcionamiento es que esta cantidad la paga el Estado a través de las nóminas de las empresas y está libre de impuestos. Eso sí, si alguna compañía decide pagar más de 21 céntimos pues lo que supere el límite tributará.

Otra de las medidas de Países Bajos se trata del denominado Plan de la Bici. Aquí el empleado compra la bicicleta a un precio más bajo y con beneficios fiscales a través de las empresas (como un elemento más de nuestro sistema de retribución flexible).

El trabajador adquiere una bicicleta nueva, de cualquier tipo y que puede utilizar también en la vida privada. Debe pagarla a su empleador a través del salario bruto, con un beneficio fiscal de hasta un 40%. En términos contables, si se elige, por ejemplo, un modelo eléctrico por valor de 1.000 euros, al final del año se ahorran 400 euros en impuestos sobre la renta. Ello significa que la bici ha costado, en realidad, 600 euros. Por otro lado, el seguro y las reparaciones son deducibles de impuestos.

Estas compañías que se suman al Plan de la Bici repercuten el coste al estado vía deducción del beneficio antes de impuestos.

Ojo, que si el empleado se adhiere a este plan no puede acogerse a la bonificación de los 21 céntimos explicada anteriormente. Mientras, los trabajadores que se adhieran a este tipo de acuerdo verán suprimida la bonificación de 21 céntimos por kilómetro para ir a trabaja bici.

2.- Francia: la suma de subvención similar puede llegar hasta los 800 euros anuales.  Las empresas se pueden acoger a lo que se denomina “Forfait de movilidades duraderas” y pagar a los empleados que usen la bici o cualquier vehículo no contaminante hasta esos 800 euros al año. Luego, estos importes los deducen de impuestos y cotizaciones sociales.

Además, el Estado ofrece subvenciones para todo aquel que quiera cambiar su viejo coche por una bici eléctrica.

3.- Reino Unido: el programa Cycle to Work Scheme (Plan para Pedalear al Trabajo) incluye una serie de incentivos y alivios fiscales para empresas y trabajadores. Tanto empleador como empleado obtienen deducciones fiscales y descuentos en su cuota de cotización a la Seguridad Social por comprar o alquilar bicicletas y complementos de seguridad como cascos o candados.

No se trata, sin embargo, de una subvención directa: el alquiler forma parte del salario bruto mensual del trabajador. La ayuda está condicionada a que al menos el 50% del uso de la bicicleta esté destinado a ir y volver al trabajo.

En países como Bélgica, Dinamarca o Alemania también hay programas con incentivos para ir en bici al trabajo.

¿Y en España qué?

En España, la primera Estrategia Estatal por la Bicicleta aprobada en el 2021 tiene los objetivos y prioridades (entre otros), de promover la movilidad sostenible, fomentar el ocio y el deporte e incentivar con beneficios fiscales y de contribuciones sociales a aquellas empresas que faciliten y fomenten el uso de la bici como medio de transporte al trabajo.

La idea es incluir a la bicicleta como un producto más de retribución en especie flexible, aunque por ahora el Ministerio de Transportes y de Hacienda no ha realizado las reformas definitivas para impulsarlo. Implementar esta ayuda en las empresas requiere de una política pública estatal que por ahora no parece próxima.

Se están dando pasos para la mejora y construcción de vías e infraestructuras así como la creación de sistemas de bici pública destinándose 224 millones de los fondos europeos Next Generation, pero en lo que respecta a políticas de incentivación fiscal y retributiva, estamos todavía muy por detrás con respecto a los países mencionados anteriormente.

¿Quién se apunta a seguir el ejemplo de Liberty Seguros, pionera en España en pagar a sus empleados por ir en bici al trabajo (0,37 céntimos el kilómetro)?

Mientras reflexionáis, os dejo con un “temazo” para los que creen en la magia…

¿Sabías qué…? En España se plantea la posibilidad de cobrar por ir al trabajo en bicicleta

Compartir en:

OTROS ARTÍCULOS QUE TE PUEDEN INTERESAR

MANTENTE AL DÍA

Recibe las últimas noticias publicadas directamente en tu email.

Los datos del formulario serán tratados por SERESCO S.A. como responsable del tratamiento. La finalidad es la resolución de la consulta planteada. La legitimación el interés legítimo de Seresco en proporcionarle la adecuada respuesta a su petición. Destinatarios, no se cederán datos a terceros, salvo obligación legal. No se realiza transferencia internacional de sus datos. Tiene derecho a: acceder, rectificar y suprimir los datos, así como otros derechos, que podrá ejercer ante el email dpo@seresco.es

Para más información puede ver nuestra Política de Privacidad.
Resuelva la siguiente operación para validar y enviar el formulario:

DESCUBRE NUESTRO EBOOK GRATUITO