La transformación digital es la integración de tecnologías digitales en una empresa o institución para la optimización de procesos.
Va más allá de la digitalización: pretende aprovechar las oportunidades de la tecnología digital para crear ventajas competitivas, mejorar la experiencia del cliente, optimizar la eficiencia operativa, fomentar la innovación, generar oportunidades de negocio e incluso abrir nuevos modelos o mercados.
La transformación digital se sirve de tecnologías y herramientas digitales para aprovechar los datos e impulsar flujos de trabajo inteligentes, facilitar la toma de decisiones y agilizar la respuesta en tiempo real a las necesidades de la organización.
Es un componente crítico en una estrategia de transformación de negocios, porque aporta a las organizaciones la capacidad de adaptarse a los cambios y oportunidades, lo que resulta un impulso de innovación para su crecimiento.
El poder de los datos
Automatización de tareas
Tecnologías transformadoras
Reducción del impacto ambiental
La transformación digital permite a las organizaciones mejorar la eficiencia, competitividad y capacidad de innovación, conseguir mayor agilidad, tener capacidad para anticiparse a los cambios y oportunidades del mercado, encontrar nuevas posibilidades de conectividad y colaboración, automatizar tareas y minimizar el error humano, así como optimizar las estrategias de crecimiento del negocio e incluso reducir costes:
Seresco ha desarrollado una solución de gestión empresarial 4.0 para la agricultura de precisión, y participa en diversos proyectos de I+D+i financiados con fondos públicos.
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