Hay sectores que paran en verano. Al menos un período, un mes, tres semanas… Algo, pero paran todos de golpe. Se baja la verja, se cuelga el cartel ‘Cerrado por vacaciones hasta septiembre’ y sanseacabó. Pero lo cierto es que, aunque la actividad de producción se detenga, la tarea administrativa no puede permitirse ese ‘lujo’, pues de ella depende, por ejemplo, cuestiones tan vitales como el que todos los empleados cobren su nómina cuando corresponde.
Quizás todo lo que ha pasado en los últimos meses nos ha hecho reflexionar sobre una figura que estaba en un discreto segundo plano y ha escalado posiciones hasta alcanzar el reconocimiento que merece por su carácter imprescindible para la buena marcha de las empresas. Hablamos, claro está, de los profesionales que se dedican a algo tan ‘del día a día’ como la gestión de nómina.
Y así como el personal encargado de la elaboración de nóminas no ha parado durante todo el estado de alarma provocado por la crisis sanitaria que estamos viviendo, tampoco se detiene en los meses en los que la mayoría de nosotros nos tomamos unas vacaciones y desconectamos del trabajo. Ha tenido que ocurrir una pandemia mundial para pensar y descubrir que las personas dedicadas a la gestión de nómina son vitales para que los engranajes de la sociedad giren correctamente.
Es buen momento para pensar si los responsables de recursos humanos lo estamos haciendo bien en este sentido: ¿tenemos profesional cualificado y suficiente para un servicio adecuado? ¿nuestro sistema de gestión de nómina puede mejorar con una herramienta más actualizada? ¿la mejor opción para nuestra empresa es la que estamos aplicando, sea outsourcing o insourcing? ¿estamos preparados realmente para asumir un servicio de gestión de nómina tan imprescindible como ha resultado demostrar?… O lo que es lo mismo ¿no crees que un equipo vital para una organización se merece toda nuestra atención para que su resultado esté a la altura de las circunstancias? Nosotros lo tenemos claro.